El juguete más antiguo del que se tiene constancia data del 2000 antes de cristo. Se trata de un sonajero hecho de terracota (tierra cocida) encontrado en un yacimiento arqueológico en Turquía.
Pero seguramente este no fue el primero, ya que suponemos que desde siempre se ha utilizado cualquier tipo de objeto para ser usado como juguete añadiendo un poco de imaginación.
No fue hasta el siglo XVIII, cuando a consecuencia de la revolución industrial, hubo un gran salto en la industria juguetera, que, con ayuda de la mecanización, permitió crear objetos más complejos, de nuevos materiales como la hojalata y otros metales, que permitió abaratar los costes y producir en serie.
Hoy en día, la industria ha evolucionado más, y la mayoría de los juguetes están hechos de materiales plásticos.
¿Por qué usar juguetes de madera? ¿Son mejores que los de plástico?
Seguro que alguna vez te han dicho que los juguetes de madera son más beneficiosos para tus hijos, pero rara vez te han dado los motivos. ¿Se trata de una moda o hay razones fundadas detrás de eso?
Te contaremos varias razones por las cuales un juguete de madera es mejor que uno de plástico.
Características de los juguetes de madera
Durabilidad del juguete
Un juguete en manos de un bebé sufre a lo largo de un día. Los bebés suelen lanzarlos, darles golpes, arrastrarlos y muchas veces pueden quedarse al aire libre. Los juguetes de madera, son más resistentes que los juguetes de plástico.
En muchos casos pueden durar años ya que envejecen estupendamente pudiendo pasar incluso de generación a generación, en muchos casos con solo algunos arañazos.
En cuanto al color, suelen tardar mucho más en perderlo comparado con uno de plástico, y en caso de rotura, son más fáciles de ser arreglados.
Consistencia del material
Los juguetes de madera suelen ser más pesados que los juguetes de plástico. Cuando el bebé los tiene en sus manos, debe sujetarlos con más firmeza estimulando la sensibilidad de las manos y haciéndolos más fuertes.
Además, al ser más pesados y duros, los bebés suelen darles más importancia aumentando el apego hacia ese juguete.
Estimulación la imaginación
La estimulación de la imaginación en los pequeños, es un punto vital para su correcto desarrollo.
En el mercado podemos encontrar multitud de juguetes que hacen infinidad de funciones, con sonidos, luces, colores, etc., haciendo que el bebé lo utilice solo de la manera que fue diseñado ese juguete, haciendo de todo por él.
Por el contrario, los juguetes de madera son como una ventana para que los más pequeños dejen volar su imaginación, inventándose historias, sonidos y funciones nuevas, siendo mucho más polivalentes.
Estimulación el tacto
Nuestros juguetes utilizan maderas naturales no tratadas, los que proporcionan una sensación real a la hora de tocarlos.
Esta madera, al ser natural, presenta variedades en cuanto al tacto, debido al tipo de lijado de cada uno de ellos y a las irregularidades que esta puede presentar. Todo esto manda señales al cerebro del bebé, haciéndo que aprenda mientras juega y se divierte.
Interactúan con la naturaleza
Al utilizar materiales provenientes de la naturaleza, ayudamos a los bebés a entender esta relación que existe entre la naturaleza y las personas.
Educar a los bebés desde pequeños con la importancia de cuidar el medio ambiente es fundamental para que crezcan con valores, como el respeto.
Ahorro económico
Sabes el dicho que dice “lo barato sale caro”. Eso pasa con los juguetes de plástico. Intentamos hacer los juguetes con la mejor madera para aumentar la durabilidad de estos y haciendo que puedan durar muchos años, con lo que nos permite amortizarlos con creces.
Creemos que los juguetes de usar y tirar no son beneficiosos ni para nuestro bebé ni para el planeta.
Ayudan a la concentración
Hay estudios que indican que la madera ayuda a las personas a reducir su estrés, mejorando a que estas sean más productivas y fomentando un buen ambiente. Generando un entorno más natural, nuestro cuerpo se siente más relajado, ayudándonos a ser más positivos.
Nuestros sonajeros están hechos con madera de arce no tratado, sin lacas ni pinturas para que sea 100% seguro para nuestros bebés y puedan ponérselo en la boca sin problemas.
Utilizamos arce porque es una madera ligera y resistente durante el paso de los años. Fácil de limpiar con agua y un poco de jabón.
Deja tu comentario